

Componentes bioactivos y alimentarios
La alimentación y la nutrición pueden ser tanto factores de riesgo como factores protectores para la salud del ser humano.
Los compuestos bioactivos son moléculas presentes en pequeñas cantidades como metabolitos secundarios en plantas, animales y otros organismos como bacterias, algas levaduras y hongos, son capaces de modular diversos procesos metabólicos y pueden presentar efectos positivos en la salud humana. En los alimentos son constituyentes no nutritivos que se encuentran, principalmente, en frutas, verduras y cereales integrales, y proporcionan beneficios para la salud más allá del valor nutricional intrínseco del alimento. Los compuestos bioactivos se están estudiando intensamente para evaluar su impacto sobre la salud, pues presentan efectos fisiológicos, conductuales e inmunológicos beneficiosos, por ejemplo, contrarrestando el estado proinflamatorio y el estrés oxidativo inducido por el metabolismo y estilos de vida considerados poco saludables. Hasta la fecha, se han descubierto numerosos compuestos bioactivos, que varían ampliamente en su estructura, función, biodisponibilidad y propiedades biológicas.
Los resultados de diversos estudios epidemiológicos indican que dietas con un alto consumo de alimentos ricos en compuestos bioactivos, incluyendo vitaminas, minerales y fitoquímicos como los carotenoides, terpenos, terpenoides, alcaloides y compuestos fenólicos, incluyendo flavonoides y ácidos fenólicos, pueden disminuir el riesgo de numerosas enfermedades crónicas vinculadas al deterioro funcional asociado al envejecimiento, como el cáncer, la obesidad, las enfermedades cardiometabólicas, el accidente cerebrovascular, la enfermedad de Alzheimer y la diabetes, entre otras.